El ecodiseño puede reducir de forma significativa el impacto ambiental de los productos. Uno de los casos analizados por el grupo de trabajo de Ecodiseño del congreso es la silla Ronda de la empresa Andreu World, que se ha rediseñado con materiales más sostenibles. Eligieron este modelo, ya que, sin modificar la estética de la silla se ha creado una nueva que cuenta con la posibilidad de desmontar las patas para hacer menor el tamaño de la silla en el transporte y el almacenaje. Además, se incorpora un cojín que ayuda a disminuir el impacto ambiental por la posibilidad de ser reparada con mayor facilidad.

¿Qué pasa cuando es un cuchillo en lugar de una silla? Los cuchillos han evolucionado muy poco a nivel conceptual. La innovación de estos se centra al utilizar nuevos materiales como el titanio o la cerámica. Ante esto, el grupo de trabajo decidió estudiar el caso de un cuchillo que se creó mediante el uso de materiales reciclados. Los fabricantes afirman que en la limpieza del cuchillo es donde se produce mayor impacto ambiental, por ello, crearon un paño en seco que pudiera reducir el impacto ambiental del ciclo de vida del cuchillo en hasta en un 87%. En un escenario futuro se debe valorar la implantación de programas de recogida de cuchillas fuera del uso debido a la importante optimización ambiental que supone y la positiva repercusión de la iniciativa.

La última experiencia es una bota de montaña. Los fabricantes de este producto aseguran que con la aplicación de simples cambios como sustituir la plantilla por una de corcho natural y la eliminación de elementos de embalaje, puede suponer importantes mejoras ambientales. Un diseño de futuro con acciones de mejora adicionales podría significar una disminución del impacto ambiental en un 26,5%, del 20% del consumo energético y del 16,7% de la huella de carbono.