No cabe duda que en estos últimos años las líneas maestras en el mundo de la energía vienen marcadas por su uso más racional, la disminución de los impactos negativos potenciando el uso de aquellas menos dañinas para el medioambiente compatibles con el desarrollo de la sociedad.
No es posible ya hablar de políticas energéticas sin introducir el concepto de eficiencia energética en el discurso
La valorización energética de los residuos no podía permanecer al margen de esta corriente y se halla inmersa en una dinámica de una mejora constante, no solo de los parámetros ambientales que ha venido siendo tradicionalmente su mayor línea de trabajo, sino de los indicadores de eficiencia energética.
De ahí la necesidad de cumplir con un determinado valor de eficiencia marcado por la fórmula que aparece en el Anexo II de la Directiva 2008/98/CE de modo que para que una planta pueda ser considerada como de valorización y no de eliminación debe cumplir con unos determinados valores de eficiencia.
Siendo algo que está en línea con la filosofía europea de optimizar el uso de los recursos merece una adecuación a la realidad de cada uno de los países en función de condicionantes locales que influyen de forma notable en el resultado final.
La dificultad que tienen la mayor parte de las plantas españolas a suministrar calor o frío por factores climáticos y de ubicación hace que la fórmula las penalice en relación a otras del centro y norte de Europa que tradicionalmente han tenido una infraestructura y una ubicaciones, así como unas condiciones climáticas, que han favorecido la producción de calor fundamentalmente para district heating
Por ello, y para que no se produzcan agravios comparativos, se hace imprescindible introducir en la fórmula factores correctores que tengan en cuenta estas peculiaridades
Una vez resuelto de forma adecuada este aspecto habrá que entrar a tener un cuenta otros tales con el factor de proximidad.
Sin duda se abre con todo ello un camino esperanzador encaminado a mejorar desde el punto de vista tecnológico y de gestión nuestras plantas, camino que por otra parte ya se viene haciendo desde hace años porque entra dentro de los planteamientos estratégicos de todas las plantas españolas.
