En las últimas décadas se ha incrementado drásticamente la extinción de especies en todo el mundo, y por lo tanto la pérdida de diversidad biológica y de los servicios ambientales asociados. Esto último ha provocado que la pérdida de la biodiversidad y la degradación de los ecosistemas sea, cada vez más, un motivo de preocupación para las empresas ya que les afecta directamente o indirectamente a su actividad y, en ocasiones, puede amenazar sus operaciones comerciales.

Sin embargo, muchas empresas a pesar de prestar cada vez más atención a este tipo de temas, encuentran dificultades a la hora de incluir la conservación y gestión de la biodiversidad en su gestión empresarial y en su estrategia de negocio.

En este sentido, es necesaria una revisión de las políticas empresariales que marquen el camino hacia un nuevo modelo que valore la conservación de la biodiversidad como una inversión o como un activo y no, únicamente, como un gasto.

Este grupo de trabajo trató de sentar las bases para poner en marcha un debate entre la sociedad española, sus administraciones, las empresas, las organizaciones no lucrativas, las instituciones científicas y otro tipo de organizaciones, con vistas al establecimiento de una iniciativa a nivel nacional de “Empresa y Biodiversidad” que promueva la participación y colaboración de los diferentes grupos de agentes implicados en el uso de recursos naturales, con el fin último de que ésta pueda derivar en estrategias exitosas que ayuden a frenar la pérdida del capital natural.